El susurro de la lluvia

En un día de otoño, Lucía miraba por la ventana cómo las gotas de lluvia caían suavemente sobre el jardín. Era una lluvia diferente, no era ruidosa ni impetuosa, sino que parecía susurrar secretos al viento. Intrigada, decidió salir a explorar el misterio que escondía esa lluvia especial.

Caminando por el bosque, Lucía escuchaba atentamente el susurro de la lluvia de otoño. De repente, vio a una pequeña hada que bailaba entre los árboles, creando destellos de luz con cada movimiento. El hada le explicó que la lluvia de otoño era mágica, y que cada gota que caía llevaba consigo un deseo que se cumpliría si se atrapaba antes de tocar el suelo.

Emocionada, Lucía decidió intentarlo. Con una sonrisa en el rostro, extendió las manos y atrapó una gota de lluvia. Al instante, un arcoíris apareció en el cielo, iluminando el bosque con colores brillantes y cálidos. La lluvia continuaba susurrando melodías de alegría, mientras Lucía agradecía a la naturaleza por regalarle un momento tan mágico.

Desde ese día, Lucía supo apreciar aún más la belleza de la lluvia de otoño y siempre recordaba con cariño aquel encuentro con el hada y los deseos que se hicieron realidad gracias a la magia de la naturaleza. Y es que, a veces, en medio de la lluvia, se esconden los mayores tesoros y las experiencias más inolvidables.

Moraleja:

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *